Has elegido rechazar las cookies basadas en consentimiento que utilizamos principalmente para gestionar la publicidad. En adelante, para acceder a nuestra web tienes que elegir alguna de las siguientes opciones.
Premium
3,99 €/mes o 39,90 €/año
Sin publicidad y mucho más
Plus
Por 9,99 €/mes
Contenido exclusivo y sin publicidad
Si has cambiado de idea, puedes aceptar las cookies y continuar usando iVoox de forma gratuita.
Con tu consentimiento, nosotros y nuestros 813 socios usamos cookies o tecnologías similares para almacenar, acceder y procesar datos personales, como tus visitas a esta página web, las direcciones IP y los identificadores de cookies. Algunos socios no te piden consentimiento para procesar tus datos y se amparan en su legítimo interés comercial. Puedes retirar tu consentimiento u oponerte al procesamiento de datos según el interés legítimo en cualquier momento haciendo clic en ''Obtener más información'' o en la política de privacidad de esta página web.
Nosotros y nuestros socios hacemos el siguiente tratamiento de datos:
Almacenamiento y acceso a información de geolocalización con propósitos de publicidad dirigida, Almacenamiento y acceso a información de geolocalización para realizar estudios de mercado, Almacenar la información en un dispositivo y/o acceder a ella , Datos de localización geográfica precisa e identificación mediante análisis de dispositivos , Publicidad y contenido personalizados, medición de publicidad y contenido, investigación de audiencia y desarrollo de servicios , Uso de cookies técnicas o de preferencias.
Comentarios
Lo que me reído oyéndoos. Enorme el principe gitano y enormes vosotros.
lo de los gipsy kings, debería ser delito, madre mía!!!!
La letra es rarita de cojones,pero es lo que tienen las drogas. No os droguéis,niños! Fijaros si da lugar a diferentes interpretaciones que, hace años, le oí decir a José Luis Salas (de Onda Cero) que para él,la letra hablaba de la pena de muerte,que había sido reinstaurada en California. Sin embargo,yo le encuentro más similitudes con la vida carcelaria. Vete tú a saber...
salir un domingo por la mañana a darte un paseíto por senderos lejos del casco urbano y te pones una historia como ésta, que además es casi desconocida para los no angloparlantes como dice Boris y disfrutas más la vida de verdad, gracias por vuestra compañía. No se puede dar más por tan poco ;)