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Comentarios
vomitivo...
Ayer estuve escuchando un podcast de La Rosa de los Vientos de hace años, en el cual intervenía Bruno, pues se le entendía a la perfección porque no hablaba como lo hace ahora. No se por que motivo lo hace ahora, algunas veces tienes que imaginarte que es el que ha dicho, y resulta muy incómodo. Si antes lo hacía bien...por qué ahora no? Por eso me gusta Martín Expósito, porque su dicción es casi perfecta, por no decir que lo es, es que ya lo de Bruno es una pasada.
Shibumi. Coincido plenamente con tu comentario, hace ya tiempo le rogué a Bruno que tomara cursos de vocalizaciòn, dicción locución, lo que sea que nos evite el esfuerzo de descifrarlo. pero es inútil, el cree que eso es un estilo. Cualquiera de los columnistas parece más locutor que el. Por ellos hago el sacrificio de escuchar
gracias a Miguel Jara y gracias a ti Bruno por tratar este tema tan importante, no siempre me gusta como tratas los temas pero en este caso si:-)
Nunca me gustaste,Bruno.
Bueno, entiendo tu punto de vista. A mi personalmente me gusta su estilo. Tiene dicción, ritmo y voz. A mi me pasa con Fernando Rueda que parece tartaja, nunca acaba las frases y corta el ritmo del programa. Tampoco aguanto a Silvia Casasola que no aporta nada, no tiene dicción, y solo dice chorradas. No entiendo porqué está ahi. No tiene ningún libro ni ha hecho nada interesante. En fin. A pesar de todo creo que es uno de los mejores programas de la radio, sino el mejor. UN saludo !
Perdon, un ejemplo de los mil que hay por en este (y todos) los programas: (Al principio, hablando de la operación Brujo). "Muchos consumidorese de aquele producto..."
Insisto: Bruno deberia contratar clases de dicción y/o vocalización. Resulta insufrible el hecho de que arrastre o añada vocales a las palabras o entre ellas. Hay veces que sintiendolo mucho, no escucho el programa por ese único motivo. Otro método útil es el de practicar treinta minutos cada día hablando con un lápiz entre los dientes. Son ideas, ya que algo debería haber hecho ya un profesional de radio después de tanto tiempo, y con más motivo, estando al frente de un programa con tanta repercusión. Otra pequeña crítica (siempre constructiva), es que cuando haya un invitado comentando un tema, no debería sentirse obligado a demostrar que conoce el tema mejor que él, y llevar el peso del tema a tratar, incluso cortando al invitado; para eso, no lo inviteis.