Has elegido rechazar las cookies basadas en consentimiento que utilizamos principalmente para gestionar la publicidad. En adelante, para acceder a nuestra web tienes que elegir alguna de las siguientes opciones.
Premium
3,99 €/mes o 39,90 €/año
Sin publicidad y mucho más
Plus
Por 9,99 €/mes
Contenido exclusivo y sin publicidad
Si has cambiado de idea, puedes aceptar las cookies y continuar usando iVoox de forma gratuita.
Con tu consentimiento, nosotros y nuestros 813 socios usamos cookies o tecnologías similares para almacenar, acceder y procesar datos personales, como tus visitas a esta página web, las direcciones IP y los identificadores de cookies. Algunos socios no te piden consentimiento para procesar tus datos y se amparan en su legítimo interés comercial. Puedes retirar tu consentimiento u oponerte al procesamiento de datos según el interés legítimo en cualquier momento haciendo clic en ''Obtener más información'' o en la política de privacidad de esta página web.
Nosotros y nuestros socios hacemos el siguiente tratamiento de datos:
Almacenamiento y acceso a información de geolocalización con propósitos de publicidad dirigida, Almacenamiento y acceso a información de geolocalización para realizar estudios de mercado, Almacenar la información en un dispositivo y/o acceder a ella , Datos de localización geográfica precisa e identificación mediante análisis de dispositivos , Publicidad y contenido personalizados, medición de publicidad y contenido, investigación de audiencia y desarrollo de servicios , Uso de cookies técnicas o de preferencias.
Comentarios
Hola Gato Cosmos, muy interesantes las anécdotas. Que bueno que ayudaste a tu papá, a conseguir su moto. al igual yo, en mi adolescencia,mi mayor sueño fue tener una moto, un amigo, allá en la ciudad de México, me prestaba una Carabela mini 100 (por cierto, la moto era del primo de mi amigo); trabajé para ahorrar y comprar una, pero no lo logré, y de verdad, que bueno que no la tuve, por qué lo más seguro es que me hubiese accidentado, ya que cuando se es adolescente, no mide el peligro y las consecuencias.
gracias gatocosmos por la dedicatoria algun dia volveremos a transmitir juntos
Muchas gracias por este episodio mi Gato Cosmos. Al igual que su señor padre, para mi tener una moto era un sueño desde que era pequeño. A las motos siempre les tuve miedo y respeto y claro me dan miedo todos esos accidentes, pero recuerdo una frase... las cosas mas hermosas estan detras de los miedos. Saludos cordiales!