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Comentarios
Mi opinión al respecto. Más importante la obra de misericordia espiritual, "intentar que se confiese esa persona difícil del trabajo". Y más limosna "también", no al revés. Pero que no olvide la Iglesia que su misión principal es ser testigo de la Resurrección, predicar el Evangelio e impartir los Sacramentos. La preocupación por los pobres y el tema social es por su afán de ser perfecta en la caridad y con el objetivo último de la conversión, no como fin en sí mismo. Y que no olvide tampoco que el estado es el principal responsable de la indigencia y de combatir la pobreza, pues la carga fiscal implementada a través de múltiples impuestos, algunos duplicados o triplicados, más la retención directa por IRPF sobre los rendimientos del trabajo, suponen que estos se reduzcan en más del 50%. ¿No es esa una gran aportación a combatir la desigualdad social?. Ello unido a las limosnas complementarias que los fieles cristianos practicamos todo el año. Que la Iglesia pida más y más, sin atender a estas consideraciones, no me parece tampoco estrictamente caritativo.