450. Sobre el deseo y la compulsión
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Gracias. fantástico Gregory Porter.
Hola Alvaro. Como ocurre con la mayoría de tus audios, la reflexión nos lleva a ver la profundidad de los argumentos. Para los buscadores que no se conforman con conversaciones banales, esto es bastante más que lo que compartimos en charlas habituales, al menos en mi caso es asi. En mi opinión, el deseo puede ser etiquetado desde varias perspectivas pero en el fondo el control sobre los deseos es algo a lo que aspira una persona que camine en poste del autocontrol, algo que es más complicado de lo que parece. También es cierto que, desde el budismo, un aspecto fundamental para romper la rueda del destino es la anulación de estos deseos, en el sentido de que los mismos nos hacen desviar nuestra atención de los valores budistas fundamentales, las cuatro nobles verdades, el octuple sendero, etc. Sin embargo, según algunas corrientes de esta línea filosófica o religión, según el caso, uno de los caminos para llegar a alcanzar un alto nivel de desarrollo "karmico" consistiría en no actuar, en no hacer, en soltar los eventos de la vida de tal forma que, ocurra lo que suceda, debemos vivir con lo que nos toque. Así pues, para terminar, los deseos en si mismos no son más perjudiciales que cualquier otro evento de la vida si son observados como la luz de un semáforo en un cruce por donde no vamos a transitar. Como un impulso a la acción, el deseo es una descarga eléctrica en nuestros neurotransmisores, una señal química acaso, una invitación para "hacer" algo. A algunos les gustan los calambres, otros preferimos sacar los dedos del enchufe y hacer lo que nuestra conciencia nos dicta. Los valores morales llegan a ser muy relativos porque son fruto, entre otras cosas, de nuestra educación y cultura. Saludos Alvaro, y gracias.
Buenas! Considero el sexo algo natural, caminar, comer... Todo cuanto surge en nuestra vida y nos invita, o nos lleva, a evolucionar termina complementandonos, haciendo que nos sintamos bien. Por otro lado, cuando sacamos cualquiera de las cosas que hacemos del sentir, de la naturalidad que supone cada una de ellas, estamos saliendo de nuestro centro también, distorsionamos el verdadero sentido que cada una de ellas supone por si misma, y así en todo. Entonces entiendo que no actuamos desde el corazón, lo hacemos desde el miedo y desde cualquiera de sus sucedáneos; cuando nos encontramos ahí, mal asunto! Entonces, los tabúes, la represión o la dependencia ya sabemos a qué nos conducen. Actuar compulsivamente lo hacemos a diario y en muy poco llega el arrepentimiento, el vacío y el desorden. La elección está clara, eso pienso. Saludos y buen descanso
Buenas tardes Alvaro y compañía, La verdad que no se que decir. Me ha gustado mucho el audio. seguiré trabajando el modo consciente por una parte en el tema deseo y Sexo. Como hasta ahora. Y la segunda seguir “Haciendo las cosas de corazón” Cuando actuamos así , creo que tod@s sábenos que nunca fallamos. Por lo cual creo que este es el camino correcto en el tema deseo y Sexo. Actuando y no pensando (no enjuiciando) Muchas gracias, Un abrazo
"Cuando dejas de sentir la vida y sólo la piensas, uno se desconecta". Me ha parecido una conclusión brillante. También muy de acuerdo con la opinión de que hacer algo de forma compulsiva es una manera de evasión y desconexión... Cuando uno se nota verdaderamente consciente generalmente le sobran los demás estímulos supérfluos: redes sociales, televisión, alcohol, sexo o cualquier otra cosa que proporcione satisfacciones inmediatas. Ese momento de bienestar artificial no suele llenarnos más que de forma momentánea, por eso imagino que se cae en la compulsividad para evitar permanentemente enfrentarse a nuestros vacíos. Un saludo y gracias como siempre, Álvaro
Creo, es mi opinión particular, que la línea es; necesidad -> deseo -> resarcimiento y resarcimiento deseo necesidad (nota: es si y solo si). La compulsiones, a mi entender, suceden cuando el resarcimiento no sacia a ese deseo y lo atrapa en un ciclo vicioso o cuesta mucho controlarlo, como sucede con las dependencias (cualquiera). Creo que como seres naturales que somos, sentimos necesidades por falta de algo (alimento, sed, reproducción, seguridad, etc.), que genera deseos de resarcirlo y la psique busca formas de conseguirlo, todo ésto de una manera lineal. Ahora bien, según la cultura de cada cual, verá válidos unos u otros métodos y, usándolos, intentará que sus fines sean cumplidos. El pensamiento y el sentimiento, como psique, se relaciona con un si y solo si, pues, para mi, son elementos que por un lado sirven para encontrar el método práctico-lógico para conseguirlo y por otro anticipar mentalmente el estado al que se llegaría tras alcanzarlo, lo cual enfatiza ese deseo que hará comprender si la necesidad queda resuelta en ese momento. Disculpa si esto no tiene cabida aquí, pero como buscador de sentido, vierto con la confianza que me suscitas, mi pensamiento. Un saludo.
Estoy de acuerdo, el deseo es algo natural. Para mi es la manera que tiene nuestro cuerpo de decirnos lo que necesita y le hace bien en cada momento. Cuando no estas lo suficientemente consciente, aparecen las compulsiones, para llenar ese hueco... que ha de ser llenado de una manera u otra. Y probablemente sea una manifestación del miedo como dices :) Gracias otra vez Álvaro por ayudarnos a reflexionar y estar ahí dándonos compañía!!! Un abrazo!!!
El deseo de defender la propia vida es sanisimo, el problema es que nos invitan a beber un agua envenenada... así pues es muy probable morir creyendo de defender la vida. Esto sucede porque no tenemos una educación contraria al narcisismo imperante de hoy. Desde la antigüedad se repite que no todo deseo es bueno... que hay que saber distinguir la planta comestible que te da la vida de la venenosa que te destruye... La vida exige prudencia. Pero cuando la vida parece resuelta, la prudencia se extingue y aparece la violencia y la injusticia generada de un corazón ya apagado. Y terminamos inconscientes de nuestro actuar destructivo. La conciencia nos ayuda porque nos une a lo divino pero tenemos que saber que estamos rodeados de engaño, así pues como bien dijo el Cristo, por los frutos los conoceréis, y también perdonalos porque no saben lo que hacen... Esa era nuestra cultura. La de hoy es la compulsión de comprar. No hay tabúes aquí, todo lo contrario. Hay un cambio de perspectivas completo: impuesto, aceptado y sufrido. La conciencia si la escuchamos nos lleva al Divino pero nos dolerá mucho abandonar nuestros actuales engaños. Yo no logro abandonar algo que deseo pero que me hace mal... El deseo se puede imponer a la conciencia y causar mucho daño. Hoy nos invitan a dejarnos arrastrar por el deseo inconsciente. Males mayores nos esperan en la medida en que la tecnología nos siga fragmentando por exigencias del dios mercado. No sé si existe una solución social o global a esta tendencia. Honestamente pienso que no. Soy escéptico en esperar cambios externos positivos pero una esperanza personal no veo porque no exista. La esperanza personal pasa por la conciencia y esta es sana si todavía logra percebir la culpa y la vergüenza. Y no es tabú esto, más normalidad de sanidad mental. Pues personas si vergüenza y sin sentido de culpa del mal que cometen no pueden que seguir haciendo desastres inconscientemente y no pueden corregirse. Una conciencia que no tenga dentro de si estos dos sentimientos es una conciencia estéril a mi entender. Reconocer culpa, sentir vergüenza, pedir perdón, remediar, es corregirse... Así si. Así se crece individualmente influyendo vitalmente a quien amamos creando un círculo virtuoso.
La compulsión es un vicio impuesto por nuestra sociedad. Tengo casi 60 años y recuerdo perfectamente cuando comenzó a circular la pornografía y el cambio que ella produjo en mi entorno social. Bien se sabe que somos víctimas de nuestras circunstancias sin una buena educación, cosa casi imposible de obtener porque la educación es producto comunitario, y es desgastante ponerse contracorriente para defender el propio vivir. Se cae, es casi imposible no caer. Cómo una España tan cristiana se ha convertido en el país más abierto al culto del sexo libre? Simple, han cambiado las premisas culturales de prepotencia. Yo no creo en tabúes. He vivido las dos etapas. Donde están dichos tabúes si no hay espacio siquiera para defenderlos? En esta sociedad enferma se cae. Pero caer da una oportunidad de aprender, porque más allá del amor comunitario está el amor por la propia vida, ese deseo de defenderla. La sociedad actual invita a "consumir", se sabe. Así el sexo se convierte en necesidad consumista desnaturalizandolo dal sentimiento y allí comienzan los problemas serios. El sexo narcisistico de hoy es expresión de nuestra cultura narcisistica. No podria ser de otra manera. Pero es un sexo estéril, sin sentimiento. y por ello termina por apagar el corazón que no encuentra motivo de existir. El hombre narciso se apaga, está muerto en vida y propaga su nulidad. Difícilmente se da cuenta de su error porque atribuye errado el universo entero.
Muy de acuerdo!!!!,el deseo siempre es bueno...!,siempre conectad@s y conscientes.....!