http://elblogsobreruedas.blogspot.com/
Música extraída de Jamendo.com
Suena el teléfono y ahí está tu voz, dulce y delicada, pronunciando la frase:
“Mañana paso a buscarte”
En vez de los típicos: “¿Está tu padre o tu madre ahí?” A los que yo casi siempre contesto: Sí, ahora mismo te lo/ a pasao”
Ahora sólo estás tú al otro lado de la línea. Empiezo a temblar con cada sílaba que dices y únicamente acierto a responder: “Aquí te espero”.
A partir de ahí, parece que el reloj va un poco más lento. Impaciente, cuento las horas, los minutos y los segundos que me quedan para verte.
Las leyes del tiempo cambian. Cada minuto se multiplica por 10 y cada hora por 20.
Y por fin, llega el día.
Llamas al timbre. Me apresuro a abrir la puerta. Avanzas dos pasos, te paras frente a mí y me das un beso. Es curioso, siempre me sorprendo al ver lo bien que encajan nuestras bocas la una con la otra.
Cierro los ojos...
Y nos convertimos en almas blancas y transparentes. No tenemos cuerpo. Sólo somos dos almas unidas absorbiendo amor. Nuestras corazones se pueden ver a través de ellas. Y aunque no tengamos ojos, extrañamente, podemos observar. Eso sí, sólo lo que nos interesa. Tampoco tenemos manos, pero nos tocamos.
De pronto, siento como si algo me atravesara el corazón. Es una espina, que al igual que a mí, a ti también te ha atravesado. Es lo malo de estar en una relación, que los dos compartimos el dolor.
Hasta que un: “La merienda está lista” de mi madre” nos devuelve a nuestro estado humano.
Te chupas los dedos.... Y yo me quedo atontada viéndote comer.
Pasamos la tarde escuchando música. Ríes a carcajadas al oírme cantar. Retiramos el sofá, la mesa, los mandos de la tele y nos ponemos a bailar en medio del salón. Juntos, abrazados.
En mitad del baile, me echas sobre tus brazos. Y cuando me doy cuenta, estoy en mi cama.
Con congoja, miro al techo y me acuerdo de esos ojitos azules que hace 3 años me hicieron sentir tanta pasión.
Fdo: Morayma_Nazarí
8 de septiembre de 2010.
Comentarios