Hoy es viernes 29 de enero. 22 grados. Parece que un pequeño verano se ha instalado en la capital. El cielo durante todo el día ha sido azul. De un azul pálido. Desde mi ventana solo se ve un trocito de cielo. Y uno se queda ahí. Y mira ese punto. Y ese punto azul del cielo me recuerda a aquel punto azul pálido del que hablaba Carl Sagan, cuando hablaba de nuestro planeta tierra. Y mostraba una foto de nuestro sistema solar donde se veía un diminuto punto azul y decía que eso era aquí. Eso es nuestro hogar. Eso somos nosotros. Ahí ha vivido todo aquel de quien hayas oído hablar alguna vez, todos los seres humanos que han existido. La suma de todas nuestras alegrías y sufrimientos, miles de religiones seguras de sí mismas, ideologías y doctrinas económicas, cada cazador y recolector, cada héroe y cada cobarde, cada creador y destructor de civilizaciones, cada rey y cada campesino, cada joven pareja enamorada, cada niño esperanzado, cada madre y cada padre, cada inventor y explorador, cada maestro moral, cada político corrupto, cada “superestrella”, cada “líder supremo”, cada santo y cada pecador en la historia de nuestra especie vivió ahí: en una mota de polvo suspendida en un rayo de sol.
Buenas noches, soy Sergio LLorens y esto es Palabras Sonoras, un programa para desconectar, relajarse y centrarse en el presente porque es lo único que tenemos.
La Tierra es un pequeño escenario en una vasta arena cósmica. Piensa en los ríos de sangre vertida por todos esos generales y emperadores, para que, en gloria y triunfo, pudieran convertirse en amos momentáneos de una fracción de un punto. Piensa en las interminables crueldades cometidas por los habitantes de un lugar del punto, sobre los apenas distinguibles habitantes de alguna otra parte del punto. Qué frecuentes sus malentendidos, qué ávidos están de matarse los unos a los otros, cómo de fervientes son sus odios. Nuestros posicionamientos, nuestra supuesta importancia, el espejismo de que ocupamos una posición privilegiada en el universo … Todo eso lo pone en cuestión ese punto de luz pálida. Nuestro planeta es un solitario grano de polvo en la gran penumbra cósmica que todo lo envuelve. En nuestra oscuridad —en toda esa inmensidad—, no hay ni un indicio de que vaya a llegar ayuda desde algún otro lugar para salvarnos de nosotros mismos. Dependemos sólo de nosotros. La Tierra es el único mundo conocido hasta ahora que alberga vida. No hay ningún otro lugar, al menos en el futuro próximo, al cual nuestra especie pudiera migrar. Visitar, sí. Colonizar, aún no. Nos guste o no, en este momento la Tierra es donde tenemos que quedarnos. Se ha dicho que la astronomía es una experiencia de humildad, y yo añadiría que también forja el carácter. En mi opinión, no hay mejor demostración de la locura que es la soberbia humana, que esta distante imagen de nuestro minúsculo mundo. Para mí, recalca la responsabilidad que tenemos de tratarnos los unos a los otros con más amabilidad y compasión, y de preservar y querer ese punto azul pálido, el único hogar que jamás hemos conocido.
Fuentes:
Carl Sagan, El mundo y sus demonios
www.muyinteresante.es
https://www.muyhistoria.es/contemporanea/fotos/fotos-hundimiento-titanic-detalle/fotos-fondo-oceano-2648
https://universoyrealidad.com/2019/02/13/5612/
https://lamenteesmaravillosa.com/sindrome-del-titanic-miedo-a-que-todo-se-derrumbe/
Comentarios
Buen podcast, relajante e inquietante, pero tranquilo y entretenido.