HILO 121
Sánchez : "El presidente OBSCENO"
Cerca de 45.000 fallecidos, más de 270.000 contagiados entre ellos más de 50.000 sanitarios y 52 sanitarios muertos entre médicos y personal de sanidad, camino de una un crisis económica como no se ha conocido en este País desde la contienda civil, con un endeudamiento que tendrán que pagar hasta nuestros nietos, un país RESCATADO, porque esa es la realidad, y dice el gobierno que de esto salimos más fuertes. Ojalá fuera así, pero NO lo va a ser; la crítica no la hacemos por hacer, pero no se puede soportar que se burlen de nuestra inteligencia, que nos tomen por tontos y sumisos ciudadanos que no nos damos cuenta de esta cruda realidad, como si no fuéramos los españolitos de a pie quien vamos a sufrir la peor parte viendo como la mayoría comenzarán, sino han comenzado ya a sufrir las consecuencia de la crisis económica que empieza a llamar a la puerta. Saca pecho el presidente anunciando que Europa se va a endeudar en 700.000 millones de euros para intentar salir de esta catástrofe; de esos 700.000 millones, la mitad, unos 350.000 millones le van a corresponder a España e Italia. Toda Europa es solidaria en esa deuda, todos los países europeos responden ante esa deuda, España también. Esa dinero no va a venir ahora; en octubre el gobierno español tendrá que presentar su plan de reformas que tendrá que ser aprobado. Nos van a tutelar, nos van a vigilar, nos van a rescatar, y esta vez no van a ser 60.000 millones para las cajas en cuya quiebra hubo muchos responsables, políticos, sindicalistas y del mundo de la banca. Pero el presidente dice que de esta salimos más fuertes. Y encima, para completar esta burla nos ofrecen un espectáculo digno de una ópera bufa: los ministros ( y las ministras, claro) aplaudiendo al jefe por los logros conseguidos haciéndole el pasillo. ¿Qué logros?; el que por su necedad y sectarismo nos ha llevado a esta situación?. No hay dignidad, no hay nada.
Y es que lo que sucedió la pasada semana con la puesta en escena de esas imágenes preparadas por el Rasputín Redondo, que al final resultaron de lo más obsceno que uno recuerda y un bofetón en el rostro de todos los españoles que han sufrido de esta pandemia perdiendo a familiares y amigos. Con esas imágenes vomitivas, insultantes, provocativas de los ministros aguardando en la Moncloa al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para ovacionarle como un grupo de palmeros y estómagos agradecidos por volver cual Duque de Alba de la reunión del Consejo Europeo de Bruselas con el compromiso de los 27, tras convencer a los más reacios de los representantes de los Países Bajos, de aportar un total de 140.000 millones de euros en ayudas directas y préstamos a España para que pueda superar las gravísimas consecuencias sanitarias y económicas provocadas por la muy deficiente gestión del Ejecutivo sobre la pandemia, resultaron patéticas . Ver ese vídeo, repito vomitivo perfectamente preparado por la mano que mece la cuna en la Moncloa, que pretende simular una especie de fiesta sorpresa a Sánchez por parte de sus compañeros, resulta más bien vergonzoso cuando en España asistimos a un fuerte rebrote de los contagios que, al igual que los anteriores, que son los que han provocado que necesitemos la solidaridad europea, el Gobierno es incapaz de controlar.
Los escenógrafos de la Moncloa estaban tan satisfechos y ufanos con el efecto propagandístico de hacer pasar por un enorme éxito el hecho de que España necesite 140.000 millones de euros para salir adelante que lo volvieron a repetir en el Congreso, para que los viéramos todos los ciudadanos que clase de estadista tenemos,
con aplausos al presidente poco antes de que se consumara un nuevo fracaso del Ejecutivo, que vio cómo el pleno del Parlamento tumbaba las medidas sociales frente al covid-19 que el PSOE y Unidas Podemos aprobaron en la comisión de reconstrucción sin pactar con nadie.
Hay quien dice que el acuerdo de Bruselas es muy positivo para España. No solo por la cantidad de dinero recibido, que ayudará a paliar el desastre económico, sino porque pone coto al irreal programa de Gobierno. Pero uno se imagina a los ciudadanos de los países que han admitido la necesidad de ser solidarios con España viendo como aquí se celebra en tono festivo la llegada del maná, se insiste en derogar la reforma laboral cuando se tiene ya la pasta en la mano y se aplaude a Sánchez como si hubiera ganado ese dinero en una partida de póker, y entiende los recelos para aportar el dinero sin garantías. Si España necesita 140.000 millones de euros para salir adelante, el doble que Grecia y tres veces lo que Portugal, países que acaban de ser rescatados, algo habremos hecho mal.
A Sánchez y a Iglesias, sin embargo, los ojos les hacen chiribitas cuando se ven con 140.000 millones de euros a su disposición. Y apuntan ya al derroche cuando insisten, de forma torticera, en que el Fondo Monetario Internacional les ha dicho que «gasten, gasten, gasten». Lo que ocultan es que lo que en realidad dijo la directora del FMI, es «gasten lo que puedan, pero guarden los recibos». Es decir, que todo lo que se nos da tendrá lógicamente que ser devuelto. Los créditos, pagando la deuda. Y las ayudas a fondo perdido, haciendo reformas y recortes. Entre estos últimos la recomendación -por no decir la exigencia- es la subida del IVA. Y no el de los productos de lujo sino los del tipo reducido y superreducido. Hasta el Banco de España admite que habrá que hacerlo. Es decir, que lo que los palmeros de Sánchez aplauden con tanto entusiasmo es en realidad que en España vayamos a pasar más penurias y nos suban la cesta de la compra... Y con estos antecedentes el presidente y su cuadrilla de palmeros sacando pecho. PAÍS como diría Forges...
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