Nació en Dinklage el 16 de marzo de 1878, comenzó su carrera como capellán del Obispo en Münster en 1904. Después de un tiempo ejerciendo como sacerdote en Berlín, se convirtió en pastor de la Iglesia San Lamberto de Münster en 1929 y en 1933 fue nombrado Arzobispo.
Cuando los nazis tomaron al poder en 1933, realizó el juramento de fidelidad al régimen y se opuso a la interferencia de la Iglesia en cuestiones políticas. Al igual que tantos alemanes de la época, estaba resentido por el Tratado de Versalles y bendijo al Führer cuando las tropas alemanas ocuparon la Renania desmilitarizado. A comienzos de la Segunda Guerra Mundial, el Cardenal adoptó una postura claramente patriótica, exhortando a los fieles a defender el III Reich, pero recomendando asimismo evitar los sentimientos de venganza o la ejecución de prisioneros de guerra.
La oposición de von Galen al III Reich había ido aumentando desde 1933 y no ocultó su descontento por la propaganda nazi en contra de la Iglesia. Se opuso firmemente a la doctrina racial nacionalsocialista y criticó abiertamente las prácticas del gobierno por ser contrarias al cristianismo. El 15 de octubre de 1934 escribió una refutación muy documentada contra los ataques al cristianismo vertidos en la obra cumbre de la ideología nazi, El Mito del siglo XX de Alfred Rosenberg (que en aquel momento iba ya por la 50º edición). La replica de von Galen (Estudios sobre el Mito del siglo XX) se publicó como un suplemento de su gaceta diocesana en Colonia y Münster y también como un pasquín en la Pascua de 1935 (19 de marzo), llegando de esta manera a varios cientos de miles de católicos su oposición a las teorías racistas del “fanático seguidor y propugnador de la nueva fe”. La reacción más dura fue la de Goering quien con su Decreto sobre el Catolicismo Político ordenaba a las autoridades políticas y policiales proceder rigurosamente contra toda injerencia eclesiástica en asuntos de la vida política.
En 1941, en una serie de famosos sermones contra el estado policial y la ilegítima “destrucción de vidas sin valor” (la Ley de Eutanasia contra enfermos mentales y otro tipo de discapacidades) se ganó el sobrenombre de “León de Münster” por su valiente desafío al nazismo: “Ellos son personas, nuestros hermanos, tal vez su vida no sea productiva, pero la productividad no es una justificación para matar. Si así fuera, todo el mundo temería acudir al doctor. El tejido social se vería afectado. Un régimen que puede salirse con la suya rompiendo el Quinto Mandamiento, puede destruir asimismo los otros Mandamientos”. En su sermón del 3 de agosto de 1941 en la Catedral de Münster, calificó al programa de eutanasia de “simple asesinato”, asegurando a su congregación que había demandando a los responsables de ese delito según el párrafo 211 del Código Penal (asesinato).
Sus sermones fueron la protesta episcopal individual más efectiva contra el régimen y sacudieron los cimientos del liderazgo nazi lo suficiente como para convencer a Hitler de suspender y abandonar las medidas de eutanasia. Aunque Himmler pidió su detención y Martin Bormann su ejecución, Goebbels recomendó moderación, advirtiendo que el arresto del Arzobispo significaría la desafección al régimen de Münster y toda Westfalia durante la guerra. Hitler que por pura táctica prefería demorar su enfrentamiento con la Iglesia, prometió un castigo adecuado para von Galen al final de la guerra, momento en el que se “saldarían cuentas con él hasta el último céntimo” (conversaciones privadas de Hitler, 4 de julio de 1942). Como resultado de esta política nazi de dilación, el Cardenal continuó ejerciendo sus funciones en Münster si bien estrechamente vigilado por la Gestapo.
El 10 de octubre de 1943, durante el bombardeo de Münster por los aliados, salvó milagrosamente la vida en la catedral en la que estaba a punto de oficiar misa (murieron decenas de fieles y sacerdotes). Fue arrestado tras el intento de asesinato de Hitler del 20 de julio de 1944 (su relación con von Molkte y von Stauffenberg está acreditada) y sobrevivió a la guerra en el campo de concentración de Sachsenhausen.
Después de la guerra, su indignación se volvió hacia los ocupantes británicos, quienes desde su punto de vista, complicaron con actos hostiles la ya complicada vida en la Alemania de la postguerra. Los británicos respondieron quitándole su automóvil, impidiéndole que visitara las parroquias y llevara a cabo las confirmaciones ya planeadas. El 13 de abril Galen se dirigió a las autoridades del Ejército de los Estados Unidos para protestar contra las violaciones a mujeres por parte de los soldados rusos y polacos y contra el pillaje y robo de los hogares, fábricas y oficinas alemanas por parte de las fuerzas americanas y británicas. El 1 de julio de 1945 denunció “el saqueo de nuestros hogares ya destruidos por las bombas”, “el pillaje y destrucción de nuestras casas y granjas en el campo por bandas armadas de atracadores”, el “asesinato de hombres indefensos”, “la violación de mujeres y niñas alemanas por lascivos bestiales” (las violaciones masivas como actos de represalia por soldados del Ejército Rojo eran desenfrenadas y se estiman en 2 millones, de las cuales tal vez más de un millón acabaron muriendo, principalmente por suicidio). En febrero de 1946 fue nombrado Cardenal por el papa Pío XII.
Murió en Münster el 22 de marzo de 1946, por una infección de apéndice diagnosticada tarde. Sus últimas palabras fueron: “Sí, sí, como Dios lo desea. Que Dios te recompense por ello. Que Dios proteja a la querida patria. Continúen trabajando por él… ¡Oh Tú, querido Salvador!” Su causa de beatificación fue iniciada por su sucesor, el obispo Michael Keller y comenzó bajo el pontificado del propio Pío XII en 1956. Concluyó finalmente en noviembre de 2004 bajo el pontificado de Juan Pablo II. Clemens August Graf von Galen fue beatificado el 9 de octubre de 2005 en la Plaza de San Pedro por el papa Benedicto XVI, en el 47 aniversario de la muerte del papa Pío (1958).
Bibliografía relacionada:
? Falasca, Stefania. Un Obispo contra Hitler: el beato von Galen y la Resistencia al nazismo (Ediciones Palabra, Madrid, 2008)
? Griech-Polelle, Beth A. Bishop von Galen: German Catholicism and National Socialism (Yale University Press, New Haven, 2002)
? Jonah Goldhagen, Daniel. La iglesia católica y el Holocausto: una deuda pendiente (Ed. Taurus, Madrid, 2002)
? Steigmann-Gall, Richard. The Holly Reich: Nazi Conceptions of Christianity 1914-1945 (Cambridge University Press, 2003)
? Testis Fidelis. Diez años de Cristianismo en el Tercer Reich: documentos del episcopado católico alemán (Información Católica Internacional, Buenos Aires, 1943)
Fuente: COPE Almendralejo. Programa La Rebotica. Serie "Héroes y Villanos" con Lola Izquierdo y Fernando Navarro.
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